Cheesecake de Frutos Rojos

8

En febrero fue el cumpleaños de mi benemérita Madre, y con Ale nos pareció una buena oportunidad para ofrecernos como voluntarios y hacer un alguito dulce para soplar las velitas y compartir con la familia. Sabiendo de antemano el amor eterno que Madre siente por la clásica tarta de frutillas y crema pastelera, encontramos una receta que resultó una excelente variante, sin dejar de estar a la altura de las circunstancias.

Bonus track: salió tan buenísima que pidieron bis hasta el atracón.

Cheesecake de Frutos Rojos con base de Galletitas Toddy

The Great Strawberry Cheesecake with a Toddy Cookie crust

Ingredientes



Para la base

  • 150g. de galletitas Toddy (las Frutigran son otra buena opción!)
  • 75g. de manteca (previamente derretida)

Para el relleno

  • 450g. de queso crema Philadelphia (también pueden usar queso Finlandia sabor clásico)
  • 3 huevos
  • 3/4 de taza de azúcar
  • 450g. de crema agria (a.k.a. Casancrem)
  • Rayadura de 1 limón
  • Un chorrito de extracto de vainilla

Para el topping

  • 400g. de Frutos rojos a elección (nosotros usamos 200g. de frutillas cortadas en 4, 100g. de moras y 100g. de frambuesas)

Preparación






Antes que nada, vamos precalentando el horno a 160ºC (medio).
Ahora si... arranquemos!

La base

Procesamos las galletitas hasta que queden bien trituradas. Las pasamos a un bowl e incorporamos la manteca derretida, mezclando hasta que adquiera la consistencia de arena mojada. Rociamos un molde para horno con aceite en aerosol y vertimos allí la mezcla, cubriendo toda la base. Aplastamos bien hasta formar una capa pareja y nos aseguramos de extenderla hacia los bordes (entre 2,5 y 4 cm. de alto está bien). Cubrimos con un film y llevamos a la heladera (15 minutos) para que se enfríe.

El relleno

Mientras se enfría la base, batimos el queso crema solito y a temperatura ambiente hasta que esté suave y sin grumos. Añadimos los huevos (uno por vez) y continuamos batiendo hasta mezclar bien todo. Agregamos el azúcar de a poco y batimos hasta que se disuelva. En este punto, incorporamos la crema agria, la ralladura de limón y la vainilla y seguimos mezclando. Una vez la preparación nos quede homogénea, la vertimos sobre la base y alisamos la superficie con una espátula.

Buscamos ahora una fuente para horno más grande que la que usamos para nuestro cheesecake, y la llenamos hasta la mitad con agua hirviendo. Acto seguido, colocamos el cheesecake dentro de la fuente con agua (para evitar que se mueva, colocamos de base 2 servilletas que mantuvieron el molde firme dentro de la fuente con agua). Llevamos todo al horno durante 45 minutos. 

Tip: También pueden envolver el molde del cheesecake con papel aluminio, de manera que cuando lo coloquen dentro de la fuente más grande eviten que el agua hirviendo se filtre en la preparación. En nuestro caso, no fue necesario.
Al sacar el cheesecake del horno, está perfecto si el centro del relleno se ve un poco "blando", ya que se va a solidificar luego cuando lo llevemos a la heladera. Una vez fuera del horno, dejamos enfriar a temperatura ambiente durante 30 minutos. Lo cubrimos luego con un film y lo llevamos a la heladera durante --al menos-- 4 horas (ideal sería que pase la noche en la heladera, pero nosotros no tuvimos ese tiempo!)

El topping

Para terminar, lavamos bien los frutos rojos, cortamos las frutillas en gajitos y colocamos todo sobre nuestro relleno, justo antes de llevar a la mesa.

Tip: Para evitar que nuestro bellísimo cheesecake se rompa al cortarlo, pueden ayudar a que la base se "despegue" del molde pasando cuidadosamente una espátula fina alrededor del borde.
Fuente: Una gran idea de la Srta. Allie Lazar que encontramos en su Blog Pick up the Fork

De fondo:


My Head Is an Animal, de Of Monsters and Men
.

8 comentarios: Deja un comentario